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Sin ser viejo siento como rápidamente olvido las cosas,
en desespero trato de aferrarme a ellas y como resultado surge un ansia de volver a vivir.
Sin ser viejo me siento cansado y varias veces triste, a veces patético y en otras inalcanzable,
como persona siento que el camino es exageradamente agobiante. La máquina pesa y devora, como la encarnación del olvido.

No se si es naturaleza o el reflejo de mi cansancio pero siento resolución a mi aflijo, hay instantes en los que de verdad siento que esto no es tan malo, y me estremesco, de ahí viene un poco de imaginación y cursilerias varias, incluso escribir aquí.